Laureana Wright González, escritora mexicana notable en la prensa de la segunda mitad del siglo XIX


3 de julio de 2025

Durante la conferencia matutina encabezada por la presidenta Claudia Sheinbaum, la subsecretaria de Educación Básica, Noemí Juárez Pérez, participó en la sección Mujeres en la Historia con la presentación de Laureana Wright González, una de las primeras mujeres mexicanas en abrir espacios de expresión y reflexión para otras mujeres a través de la prensa. En su intervención, la subsecretaria destacó que, en la segunda mitad del siglo XIX, las mujeres comenzaron a firmar sus textos, dejando atrás el anonimato y los seudónimos, con el propósito de posicionarse en el espacio público como autoras y protagonistas.

En la cápsula de video se narró que Laureana Wright nació en 1846 en Taxco, Guerrero. Hija de Eulalia González, mexicana, y Santiago Wright, estadounidense, creció en un hogar liberal donde recibió una formación poco común para las mujeres de la época: aprendió inglés, francés y adquirió conocimientos de ilustración. Escribió sus primeros versos en 1865, muchos de ellos con temática patriótica, y se incorporó a espacios culturales y científicos como el Liceo Mexicano y el Liceo Altamirano de Oaxaca, siendo una de las pocas mujeres aceptadas en dichos círculos.

En la década de 1880, Wright se consolidó como periodista y escribió en El Diario del Hogar, desde donde criticó abiertamente al gobierno de Manuel González, lo que le generó amenazas de destierro. También colaboró en El Álbum de la Mujer y creó redes con intelectuales de su tiempo, como Mateana Murguía y María del Refugio Argumedo. En 1887 fundó y dirigió el semanario Las hijas del Anáhuac, que un año después se transformó en Violetas del Anáhuac, publicación dedicada a la formación integral de las mujeres jóvenes mediante biografías, cuentos, noticias, consejos y poesía.

Convencida de que el conocimiento era clave para la emancipación femenina, escribió ensayos como La emancipación de la mujer por medio del estudio y Educación errónea de la mujer y medios prácticos para corregirla, en los que cuestionó los modelos tradicionales de formación. Su obra más relevante, publicada de manera póstuma, fue Mujeres notables mexicanas, donde recopiló 124 semblanzas de mujeres destacadas, entre ellas la médica Matilde Montoya. Esta obra es considerada un referente en la genealogía del feminismo mexicano.

La Dra. Juárez subrayó que Laureana Wright fue una de las primeras mujeres en recuperar la historia de otras mujeres y en promover la participación femenina en la esfera pública. Publicar un periódico en el siglo XIX representaba un reto considerable por los costos y la necesidad de lectores constantes. Que Wright y sus compañeras impulsaran estas iniciativas fue una señal del creciente interés de las mujeres por los asuntos públicos. Además, fue una firme defensora de la Independencia de México y de otras causas históricas que inspiraron su producción poética.

Para concluir, la subsecretaria compartió un fragmento de un poema escrito por Wright en honor a la Batalla del 5 de mayo de 1862, en el que exaltó el valor y la dignidad del pueblo mexicano frente a la invasión extranjera:

“Débil tú ante su fuerza, ante su fama; desconocida, oscura, sin renombre. Te alzaste erguida ante la vil afrenta; en sostener tu honor no vacilaste, y a los sables blandidos en Magenta, tu valeroso pecho presentaste”.